Contar el calvario: Cielo Eberhardt y su protagónico en "El infierno de los vivos"

La joven actriz de Paraná, Cielo Eberhardt, es protagonista en el film "El infierno de los vivos". Cómo fue encarnar un personaje que sufrió abusos.

El escritor Italo Calvino sostuvo hace cincuenta años que el infierno de los vivos es "el que habitamos todos los días" y que para no sufrirlo tenemos dos opciones: lo aceptamos y somos parte de él; o buscamos, dentro del infierno, qué o quiénes no lo son. Este concepto sobre cómo sobrellevar la vida ante las adversidades es parte del espíritu de la película "El infierno de los vivos", del cineasta Alberto Gieco, basada libremente en la novela de Alicia Barberis. El film se rodó en varias locaciones de Santa Fe entre julio y agosto de este año. La historia es protagonizada por Cielo Eberhardt, bailarina y actriz de Paraná que encarna a Mariana, una adolescente que sufrió abusos por parte de su padrastro y que busca salir adelante. "La primera vez que leí el guion lloré", confió a UNO.

La joven actriz de 16 años contó que le resultó difícil retratar la fuerza y la sensibilidad del personaje, pero encontró el apoyo del director y el equipo de la película para ejecutar la representación.

Eberhardt manifiesta un gran interés por el arte. Desde los seis años estudia danza en distintas academias de la capital entrerriana y su actividad le ha dado frutos. Por ejemplo, este año fue noticia cuando obtuvo una beca de formación para el Neglia Conservatory of Ballet, en Buffalo, Estados Unidos. Sin embargo, también suele aparecer por otra de sus facetas: la actuación.

En diálogo con UNO, Eberhardt se refirió a sus inicios en el mundo de la actuación y su experiencia en el film "El Infierno de los vivos" que seguramente verá la luz en 2024.

—Sos bailarina y actriz, pero ¿cómo te definís?

—Yo más que nada hago danza. Es lo que hago desde los seis años y es algo que creo que me gustaría apuntar como profesión. Actualmente estoy en la academia Carla Tista, pero antes estuve en la escuela del Teatro 3 de Febrero y en Espacio Danza. También trabajo en cine, aunque nunca hice teatro. Participé en muchos castings. Hice '11:40', que es un cortometraje de Claudia Ruiz. Después, como quedó el contacto, me mandaron a algunos castings y así fue como participé en otros cortos y películas. Alberto Gieco vio mis trabajos anteriores y me pidió participar del casting de "El infierno de los vivos". Yo justo estaba en Carlos Paz por danza. Fui los últimos días, a fines de mayo, y quedé.

—¿Cómo surge el interés por la actuación?

—Siempre me gustó actuar. En mi casa hay mucha cultura de parte de mis papás. Siempre me influenciaron para ver el cine de culto, entonces siempre me gustó mucho. Arranqué a actuar una vez que mamá vio una publicidad del casting de '11:40' en Facebook y me dijo '¿ché, querés participar? buscan nenas más o menos con tu físico'. Ahí mandé foto y quedé para ir al casting.

—Y ahora te tocó un rol importante en la película de "El infierno de los Vivos". ¿Cómo fue encarnar el personaje de Mariana?

—Fue fuerte, porque es un personaje que sufrió abusos, entonces no fue difícil empatizar con el personaje, porque ves todo lo que sufrió. Fue difícil ponerse en su mentalidad: tener que vivir en el lugar donde le pasó eso es fuertísimo, que su mamá no la apoye y no tener un padre presente. Son un montón de cosas que hacen que vos te tengas que poner en el lugar de ese personaje. Mientras leía el guion, que lo leí varias veces, me tenía que concientizar mucho y decir, bueno, ¿qué pensó en este momento?


—¿Te conmovió el personaje?

—Sí. La primera vez que leí el guion lloré.

—¿Y qué te pidió el director a la hora de preparar el personaje? y ¿qué te costó más?

—Una cosa que me parece que tuve que trabajar mucho fue la fuerza del personaje. Porque, a pesar de todo eso que sufrió, es un personaje muy fuerte. Ella se tiene que ir de su hogar. La vida la llevó a tener que tomar las decisiones rápido y ser, tal vez, un poco impulsiva. Incluso tiene ataques de ira y cosas así. Alberto me insistía mucho en esto y en la sensibilidad del tema. Cuando alguien tocaba el tema del abuso, enseguida aparecía ese dolor. El sufrimiento se tenía que ver.

—La película está basada en el libro de Alicia Barbieri ¿pudiste leerlo o sólo te acercaste a la historia con el guion?

—Alicia se basa en una historia real para escribir el libro, y Alberto usó de inspiración el libro, pero siguió más la historia original que el libro. Por eso preferí no leer el libro, porque hay algunas diferencias. La película se asemeja un poco más a lo que es la historia real.

— ¿Qué te decían tus compañeros de colegio? ¿Saben que actuaste?

— Me preguntan mucho, porque no se conoce lo que hay atrás de una película. Me acuerdo que una mujer se sorprendió porque prestó su casa para que filmemos. Ella nos dijo que pensó que la filmación iba a ser un hombre con una cámara. El día de la grabación llegó un equipo de 40 personas. Esas cosas del detrás de escena conté en el colegio, al igual que cuestiones sobre el personaje y el trabajo con el guion, al cual lo sigo llevando en la mochila.


—La película ya se terminó de filmar, ¿te quedaste con ganas de seguir actuando?

—Sí, me encantaría trabajar sobre todo por este ambiente que hace el equipo, que es tan lindo. Alberto y el equipo son un amor. Si bien era un trabajo fuerte y que me podría haber afectado, porque a veces me quedaba con una carga emocional, el equipo hacía que sea muy leve. Por eso me dan ganas de volverme a encontrar con ellos.

—¿Qué les dirías a aquellas personas que quieren incursionar en la actuación y tal vez necesitan algún empujón, digamos?

—Que lo hagan, porque meterse en la piel de un personaje es hermoso. Mi experiencia con diferentes equipos es positiva. Te hacen sentir cómodo y te guían.

La "ópera prima" de Alberto Gieco

La filmación de "El infierno de los vivos" se hizo en cuatro semanas. El rodaje se realizó en Santa Fe, Rincón y Santa Clara de Buena Vista, con equipos técnicos y de actores y actrices de la región.

La película es la ópera prima de Alberto Gieco, realizador audiovisual y teatrista nacido en Santa Clara de Buena Vista, provincia de Santa Fe y radicado actualmente en Los Ángeles, California.

“El punto de partida es el abuso sexual pero la película explora el proceso de una joven que no acepta su situación y sale en busca de ayuda. Sus encuentros le permitirán procesar lo ocurrido y buscar formas de sanación. Como dice ítalo Calvino en Las ciudades invisibles, libro que es parte de la trama: ‘buscar y saber reconocer quién y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacerlo durar, y darle espacio’. Refleja mi creencia en un mundo solidario, en el que la relación con los otros está basada en los afectos y la aceptación de las diferencias. Por otro lado, la historia presenta el poder que tiene el arte como forma de conocimiento y comunicación”, dijo Gieco en un parte de prensa cuando la película comenzó a grabarse.

El film, que se encuentra en etapa de postproducción, fue declarada de interés en el rubro “Largometrajes regionales” por el Instituto de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y el viernes 1° de septiembre recibió el mismo reconocimiento por parte del Honorable Concejo Deliberante de Santa Fe.

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El Concejo declaró de interés la película "El infierno de los vivos"